El poderoso abono para las plantas que nadie conoce y todos desechan
Reciclar los restos de tu café no solo es bueno para el ambiente, también es una forma inteligente de cuidar tu jardín. A partir de ahora, ese cafecito de la mañana podría ser el mejor aliado verde para tus plantas.
¿Tiras los restos del café a la basura cada mañana? Tal vez deberías pensarlo dos veces. Los residuos del café, ya sean granos usados, borra o incluso las cápsulas usadas, pueden convertirse en un abono natural lleno de beneficios para tus plantas.
El considerado "oro marrón" es una fuente rica en nitrógeno y otros nutrientes esenciales que ayudan a mejorar el suelo, estimular el crecimiento vegetal y hasta ahuyentar plagas.
Aquí te contamos por qué y cómo usar correctamente el café usado como abono en casa.
Rico en nutrientes esenciales para el crecimiento
Los restos del café contienen nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio y otros minerales traza fundamentales para las plantas.
Estos nutrientes ayudan a mejorar la estructura del suelo y favorecen el desarrollo de raíces fuertes y flores más vistosas.
A diferencia de algunos fertilizantes químicos, el café es una opción ecológica y de liberación lenta, ideal para jardinería urbana o huertos caseros.
Revuelve el café usado con composta para balancear el pH y evitar excesos de acidez, especialmente si tu planta no tolera suelos ácidos.
Mejora la estructura del suelo y retiene la humedad
Además de nutrir, el café molido actúa como mejorador de suelo. Su textura porosa ayuda a airear la tierra compactada y mejora la retención de humedad, algo clave en temporadas secas o veranos intensos.
También favorece la actividad microbiana benéfica, que acelera el proceso natural de descomposición de materia orgánica.
Esparce los restos del café directamente en la superficie del suelo o entiérrala ligeramente, esto para evitar que se compacte y cree una capa impermeable.
Repelente natural de plagas
Muchos jardineros juran que el aroma y los compuestos del café ayudan a repeler caracoles, hormigas y otros insectos no deseados.
Aunque no es un insecticida como tal, su uso constante puede reducir la presencia de ciertas plagas de forma natural.
Además, agregarlo a tu compost acelera su descomposición y equilibra los materiales verdes y marrones.
Toma en cuenta que usar demasiado café puede alterar el equilibrio del suelo. Con una o dos cucharadas por maceta a la semana es suficiente.
