Profeco revela la verdad sobre el queso de puerco, ¿es realmente sano este embutido mexicano?
La Profeco dedicó un espacio exclusivo en su Revista del Consumidor para evaluar si el queso de puerco es, en realidad, un producto sano y recomendable para las personas.
¿Qué es el queso de puerco?
El queso de puerco es carne de la cabeza del puerco y es usada como complemento principal y también como botana. En general es un embutido con carne prensada.
La clave para conseguir la consistencia gelatinosa que la distingue se cubre cuando se enfría la mezcla de todas las carnes. No lleva tripas y su recorte es famoso en rebanadas.
Es parecido a otros embutidos como jamones y salchichas, los cuales tienen la mayor demanda del mercado, seguido de tocino, chorizo, longaniza y mortadela.
Para Profeco, ¿Qué contiene el queso de puerco?
El estudio de Profeco de mayo de 2025 evaluó algunos conceptos como nivel de proteína, grasa, carbohidratos, nitritos, niveles de sodio y contenido energético.
El queso de puerco contiene cárnicos como carne de cabeza, carne de cerdo y algunos adicionan grasa de cerdo. También tienen agua, especias, sal común, aditivos alimentarios como conservadores, fosfatos y algunos fabricantes añaden almidón, azúcares o colágeno.
Es importante mencionar que lo que más tiene este producto es un nivel alto de sal. La mayoría de los productos embutidos contienen sal común, lo cual añade sabor y prolonga su vida útil. Sin embargo, el abuso en su consumo es un riesgo para la salud.
¿Hace daño comer queso de puerco? Profeco responde
Profeco avisó en su reporte que el consumo en exceso sí puede ser perjudicial para la salud. Se extiende la invitación para mantener una dieta saludable sin exceso de sodio ni grasas saturadas, ya que se evitarán enfermedades no transmisibles, como las del corazón.
Es importante mencionar que se recomienda consumir embutidos sin sellos y evitar romper la cadena de frío, ya que deben mantenerse siempre en bajas temperaturas.
Comer queso de puerco no es necesariamente malo, pero depende de la dieta y preferencias personales. En cuanto a salud, se entiende que su alto contenido de grasa saturada, contenido de sodio y calorías puede ser un riesgo para personas con hipertensión o enfermedades cardiovasculares.
